sábado, 10 de mayo de 2008

GRAN MADRE RUSIA


La Gran Madre Rusia continua siendo uno de los países más modernos y menos contemporáneos del Mundo, es decir las antípodas de un ejemplo de innovación.

La última muestra de esta tendencia endémica nos la han dado esta semana el pequeño Putin y su pupilo Medvédev con motivo de la celebración del 63º aniversario de la victoria soviética sobre el Reich Milenario. De partida, es un gesto de mal gusto celebrar algo que todos deseamos olvidar. Pero resulta increíble que el alcalde de Moscú tenga que empezar mañana a pensar cómo pagar los trabajos de asfaltado de la Plaza Roja después del anacrónico desfile militar a la más pura usanza estaliniana. La hoz y el martillo, los misiles Iskander – M y Topol – M, el bombardero estratégico Tu- 160, las banderas rojas, la tribuna de la contra inteligentsia y toda la parafernalia del pasado se dieron ayer cita, una vez más, para intentar convencer a los sufridos rusos que todavía son alguien en esto del concierto internacional.

Los principales enemigos de la innovación acostumbran a ser, por orden de aparición, la ausencia de un liderazgo y la imposibilidad de superar la incertidumbre que genera todo posible cambio.

En este sentido, la Madre Rusia lo tiene claro. A falta de liderazgo, tiene más de lo mismo: burócratas reconvertidos a plutócratas baratos, multimillonarios de dudoso gusto y procedencia, la Organizatsiya, mafia rusa, trampolín para llegar a todo lo anterior. Y, por encima de todos ellos, el nuevo padrecito Vladímir.

En cuanto a la incertidumbre, está claro que no han conseguido superarla. Sacar los cohetes a la calle es la señal más evidente de que ni saben cómo enfrentarse al cambio, ni tienen la más mínima intención de intentarlo.

Queda el pequeño consuelo de la ridícula innovación que se vivió ayer en Moscú: la desaparición de las portianki, paños de algodón para envolverse los pies antes de calzarse las marciales botas.

Buenas tardes y buena suerte

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los monumentos identitarios de europa pronto pasaran a mejor vida a este paso, el arco de triunfo de paris será sustituido por el busto del pato donald.