miércoles, 30 de abril de 2008

VISITA OBLIGADA


Hace ya mucho tiempo que sigo su trabajo, pero no me canso de recomendar visitar su web:
http://marinacano.com
Un ejemplo de sensibilidad y creatividad.

TRENDS


Como ya comentaba en un post anterior, la semana pasada tuve la oportunidad de reunirme con otros colegas mediadores en innovación de Europa y América para analizar los escenarios de futuro inminentes. Hacer una síntesis de las conclusiones a las que se llego podría ser interminable e inadecuado para un contexto como el de este blog. Pero si quisiera apuntar los aspectos más significativos.

EL TAPADO

La crisis financiera está centrando toda la atención en estos primeros meses del año. Los analistas intentan esbozar las trends de futuro a corto plazo: renovables, biotecnología, TICs, etc. Pero está pasando desapercibida la auténtica crisis que se acerca y que puede cobrar dimensiones espectaculares: LA CRISIS ALIMENTARIA.

LOS TIEMPOS

La actual crisis financiera supondrá un estancamiento que se dilatará hasta el primer trimestre del 2011 desde una perspectiva optimista, pero que en cualquier caso no irá más allá del segundo semestre del mismo año.

LA CONFIRMACIÓN

El relanzamiento vendrá impulsado por la confirmación del papel que han de jugar los nuevos motores de la economía global: RENOVABLES, TECNOLOGIAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN, LOGÍSTICA Y ECOEFICIENCIA.

LA CLAVE

No es un secreto que nos encontramos en un ciclo dilatado de cambio. No acabamos de definir totalmente el nuevo modelo porque todavía se encuentra en construcción, pero hay que evitar hablar de Tercera Revolución Industrial, Nuevo Capitalismo o términos similares que no son otra cosa que un intento de hacer pervivir algo que agoniza.

La clave del nuevo modelo no es la Innovación ya que esta es un acto reflejo y permanente de la especie humana. La clave se encuentra en nuestra CAPACIDAD CREATIVA para superar los viejos modelos estables.

EL FUTURO

El futuro no está todavía aquí, pero se encuentra cercano. El primer cambio debe ser emocional a todos los niveles, tanto empresarial, político como social.

martes, 29 de abril de 2008

ROOSEVELT TRASCENDENTAL


En cada ocasión que paso unos días en Londres, cumplo con uno de mis ritos: visitar Grossvenor Square, una deliciosa plaza presidida por uno de mis héroes: Franklin Delano Roosevelt.

Roosevelt es uno de los grandes emprendedores del siglo XX y quizás también el más olvidado frente a las figuras de Pepe Stalin, Churchill y Adolfo el Cabo.

Sin embargo, fue un hombre que supo enfrentar y sobrevivir a casi todo, un auténtico self- man. Tuvo que afrontar una de las peores enfermedades que pueden afectar a hombres de su carácter. Se inauguró en la presidencia afrontando la peor crisis económica de la historia de Estados Unidos. Tuvo que navegar entre los deseos insistentes de un solitario Churchill y la decisión de involucrar a su país en un conflicto generalizado. Y finalmente, cuando su enfermedad lo mantenía en un estado de permanente dolor, tuvo que mediar entre un Stalin desbocado y un primo inglés que no acababa de creerse lo que ocurría.

Quizás su innovación más sonada y también más olvidada fue su New Deal, el conjunto de medidas para enfrentar la depresión de los años 30 y, muy particularmente, el Welfare State, algo que muchos presidentes del Imperio han olvidado para vergüenza del país.

Frente al liderazgo místico de Adolf Hitler, el liderazgo del terror de Stalin y el liderazgo inspirador de Churchill, el liderazgo de Roosevelt fue más allá pasando a ser uno de los paradigmas de lo que hoy llamamos: LIDERAZGO TRASCENDENTAL.

Buenos días y buena suerte

domingo, 27 de abril de 2008

1-2-3 AL TI-MO INGLÉS


1,2,3 al timo inglés

Mis ausencias en los post se deben a cuestiones de trabajo: una semana en Londres meditando con otro buen número de colegas sobre esto de la crisis y la innovación. Tiempo tendré de hablar de ello. Hoy algo ligero, pero curioso.

En uno de mis ratos libres, decidí visitar uno de los pocos museos que no conocía en la ciudad: el Museo del Diseño de Londres.

Estando en un sitio tan cool como los docks no esperaba gran cosa en cuanto a contenidos, pero la realidad supero mis expectativas con creces. Después de pagar religiosamente 8 libras de las esterlinas inicie mi visita al exiguo primer piso que albergaba una temporal de Richard Rogers: bien, sin más.

Una vez concluido mi breve recorrido por la temporal, inicie mi visita al segundo y último piso. Sin desperdicio amigos: un nuevo 500, un ipod, unas bicicletas de estas de alquilar en la city, cuatro sillas cool y una pared con distintos logos. Y aquí se acabó lo que se daba.

Increíblemente minimalista:

1. Pagar 8 de las esterlinas

2. Partirte de risa con las cuatro chismes del segundo piso

3. Jurar en arameo

El timo inglés

De verdad, una ciudad que se ha destacado siempre por el design no se merece esta tomadura del pelo.

Buenas tardes y buena suerte

martes, 22 de abril de 2008

OTRA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL NO, POR FAVOR


A uno le da no se qué poner en duda las percepciones de uno de los gurús del momento, Jeremy Rifkin, pero, ¡qué coño!, es la prerrogativa que nos queda a los monaguillos.

Todo esto viene a cuento de algunas ideas que Rifkin lanzó recientemente en Capital, empezando por el titular: “España puede liderar la tercera revolución industrial”. Si no fuera por el verbo poder, hubiera pensado que se trataba de un flash recuperado de la hemeroteca franquista.

Para Rifkin la clave de esta supuesta tercera revolución industrial son las energías renovables y muy particularmente su apuesta preferida: el hidrógeno. Todo ello unido al desarrollo de micro redes de almacenamiento interconectadas entre sí, pero con autonomía para generar y gestionar sus necesidades energéticas, algo que a Rifkin le gusta llamar smart grids.

Particularmente, me declaro defensor acérrimo de la simpleza en los planteamientos que no es otra cosa que reflejo de sabiduría. Si alguien necesita tres horas para explicarse quiere decir que no tiene las cosas nada claras. Pero, en este caso, la rotundidad no acaba de convencer.

Las energías renovables son objeto de deseo, tanto ambientalista como materialista. Todos confiamos en que puedan darnos un respiro de aquí al 2050 en las tenebrosas previsiones medioambientales. Pero convertirlas en el Santo Grial me parece exagerado o, al menos, desmedidamente optimista.

Como decía el otro, no hay que esforzarse en imaginar el futuro porque ya está aquí. Y ese futuro pasa, entre otras cosas, por dejar de hablar de otra revolución industrial, una más no, por favor. Después de China y quizás India, se nos han acabado los clones y es más que dudoso que África pueda ser la despensa.

Hay que ser más optimista e imaginativo y no confiar, una vez más, en la capacidad del viejo capitalismo para reinventarse de nuevo. Debemos aspirar a invenciones y olvidarnos de recreaciones de supervivencia.

Y de igual forma, debemos asumir nuestras limitaciones y generar nuevas oportunidades. En este modelo que lleva ya tres siglos recreándose, tenemos pocas oportunidades de situarnos en cabeza. Y ahora no es el momento de intentarlo una vez más.

Es correcto explotar nuestras condiciones para situarnos en cabeza de las renovables. Es necesario mejorar nuestros índices de I+D. Es una necesidad intervenir sobre nuestra particular cultura productiva. Pero, ahora que el momento exige una pausa y un ejercicio de prospectiva estratégica global, debemos hacer uso de algo que es consustancial a todos los humanos: creatividad. Y en esto, si podemos aspirar a ser el referente, al menos europeo.

Buenos días y buena suerte

(IMAGEN: JAMES QUANTZ - 2007)

lunes, 21 de abril de 2008

¡QUE VIENEN LOS RUSOS!


Existe una vieja leyenda internauta que narra la absurda prepotencia de la NASA y la increíble creatividad de los rusos.

La leyenda describe como, una vez comenzada la carrera espacial, los norteamericanos cayeron en la cuenta de que los astronautas necesitarían tomar datos, pero los bolígrafos convencionales resultaban inútiles en gravedad cero. La decisión que adoptó la NASA fue la de contratar los servicios de Andersen Consulting por el módico precio de 120 millones de dólares, aunque algunas versiones hablan de 120.000 millones. Frente a todo este despliegue, los rusos optaron por utilizar un simple lápiz de los de toda la vida.

Ciertamente es una leyenda aunque en lugares como la botiga del CosmoCaixa se pueda adquirir una réplica del famoso lápiz ruso a precio de oro.

La realidad es que tanto norteamericanos como rusos comenzaron por utilizar lápices convencionales. Sin embargo, estos artilugios representaban un grave peligro si las minas se rompían y comenzaban a flotar por el habitáculo de la nave espacial. La solución fue el desarrollo del denominado Fisher Space Pen en 1965 sin costo alguno para la NASA y que podía escribir con frío glacial (-45º) y con un calor abrasador (+120º), bajo el agua o con gravedad cero.

Pese a ser una leyenda, yo continuó haciendo uso de ella en mis seminarios y conferencias porque, aunque incierta, ilustra perfectamente la inutilidad de la innovación cuando la fiebre tecnológica se impone. Se suele decir que la necesidad agudiza el ingenio, pero en este hipotético caso lo que agudiza es la estupidez humana.

Por otro lado, aunque la leyenda fuera cierta, no dejaría de ser incorrecta ya que se acostumbra a utilizar como ejemplo de innovación ingeniosa. Si hubiera sido cierta, los rusos no hubieran innovado absolutamente nada. Simplemente habrían aplicado el sentido común.

Pero las leyendas son como los besugos del Cantábrico que continúan ofertándose en la carta de afamados restauradores cuando hace años que pasaron a mejor vida. Pero sirven para alimentar los sueños.

Buenos días y buena suerte

domingo, 20 de abril de 2008

CIENCIA


Ahora nos ha entrado la fiebre de la ciencia. Carecemos de científicos, hay que potenciar la presencia de la Ciencia en las distintas etapas educativas, debemos convertirnos en un referente tecnológico, viva el Ministerio de CIENCIA e innovación.
El informe PISA entre otras cosas señalaba nuestra baja comprensión lectora y, en definitiva, nuestra baja capacidad para "comprender los problemas".
Si todo el asunto va a consistir en arañar una hora más para las mate, las ciencias naturales, la física&química y prácticas de laboratorio: ¡vamos listos!
Una vez más, adiós inteligencia estratégica.

Como decía mi tía abuela: ¿para qué quieres un coche si no tienes dinero para gasolina?

Quizás lo que nos hace falta es sentarnos a analizar estratégicamente nuestro futuro y, sobre todo, empezar a aprender aquello de la gestión del talento.

Buenos días y buena suerte.

sábado, 19 de abril de 2008

¡QUE VIENEN LOS CHINOS!


¡Que vienen los chinos! Parafraseando una nadería de movie americana de los años de la Guerra Fría.

Lo cierto es que lo de China empieza a parecerse a los rusos cuando aparecían como el Gran Hermano de la Oscuridad, armados hasta los dientes y capaces de comerse Europa en un plis-plas. Luego resultó que todo era cartón piedra y no era tan feroz el lobo o, por lo menos, menos feroz que cuando en 1945 no dejaron piedra sobre piedra y mujer sin violar en una Alemania en retirada de su Reich de los Mil Años.

Es difícil realmente que China llegue a ocupar un puesto de cabecera en la economía global. Lo tiene prácticamente todo en contra. Una estructura política que pese a parecer que ha reinventado la pólvora es un lastre a largo plazo difícil de superar. Una experiencia histórica que demuestra que es una sociedad que no acierta a tomar las decisiones adecuadas en los momentos cruciales. Una estructura social difícil de ajustar a las necesidades de una economía de consumo a gran escala. La inmensidad de la inmensidad con regiones que sobreviven prácticamente en el Neolítico y realidades nacionales dispares que no hacen sino debilitar al Dragón.

Y qué decir de la clase empresarial. De hecho, ¿dónde están los empresarios chinos? Sabemos donde están los millonarios chinos, pero de los empresarios no tenemos apenas noticias. En fin, un paradigma de cómo no se debe administrar el talento.

Pasar de una economía productora mediatizada por intereses exógenos a una modelización de futuro no es tan sencillo como levantar grandes edificios y generar ciudades temáticas de colorín. Los chinos trabajan como chinos, pero poco más.

martes, 15 de abril de 2008

INVENTA QUE NO ES POCO


Hace algunas semanas me encontré navegando por la red una reseña sobre una charla que di en BCN hace ya algunos meses. No me ponía demasiado a caldo, digamos que una de cal y otra de arena. La de cal fue calificarme de clásico en la parte de mi discurso que hacía referencia al desarrollo de la innovación.

No es la primera vez que escucho este tipo de comentarios y, pese a que acepto todas las opiniones y ahora más aún con el nuevo ministerio de la Igualdad, quisiera aclarar brevemente la diferencia entre invención y desarrollo.

Cuando Pablo Picasso pintó Las Señoritas de Avignon, podríamos decir que inventó el cubismo al romper de forma radical con todo proceso imitativo. Esta fue la fase de invención. Pero, una vez que la idea tomó forma en su cerebro, inició la fase de desarrollo y aquí se acabó el proceso creativo para entrar en una rutina operativa sobradamente conocida. Conseguirse una tela, unos pinceles, tubos, un lugar donde apoyar la tela y así sucesivamente.

Nadie duda del inmenso potencial creativo del malagueño cuando desplegó una representación estrictamente dimensional que daba lugar al cubismo puro. Pero después se limitó a ser clásico en la ejecución como no podía ser de otra forma.

Podemos clonar a la abeja maya para conseguir una miel con propiedades curativas para el acné juvenil, pero al final habrá que producirla industrialmente y colocarla en una estantería para su consumo. Podemos hacer que los envasadores calcen zapatitos Pepita is Dead y bolsos portaobjetos de Bimba&Lola, pero habrá que envasar por narices.

En definitiva: la invención es la invención y la reducción a la dura realidad es otra copla.

Buenos días y buena suerte

lunes, 14 de abril de 2008

PIROMANOS


La innovación, como todo en esta vida, es cuestión de necesidad. Dicho de otra manera: una organización no puede estar en continuo estado de alerta por innovación, entre otras cosas porque no sobreviviría a las cuentas del primer trimestre.

Pero una cosa es innovar por necesidad y otra por obligación. A quienes practican este segunda opción los denominamos en el argot del gremio “apagafuegos” y de ellos ya hable en mi serie de post Tribus de la Innovación.

Innovar por obligación es lo mismo que decir innovar sin convicción. No queda más remedio, así que… Los resultados nunca dejan de ser discretos y, por supuesto, de dudoso valor añadido por lo que se reafirman en sus posiciones y hasta la próxima obligación. De hecho, es dudoso que aporten algo porque casi siempre llegan a procesos miméticos con alguna pequeña nota diferenciadora.

Este es el TERCERO DE LOS ERRORES CASI MORTALES:

SI ERES UN APAGAFUEGOS ACABARÁS PIRÓMANO

Y es que como decía mi abuela: quien juega con fuego se mea en la cama.

Buenos días y buena suerte.

domingo, 13 de abril de 2008

MASTER PAPERS


Siento no continuar momentáneamente con mi serie de Errores casi mortales, pero la actualidad manda y, además, en esta vida hay que ser de todo menos lineal.

En mi post de ayer, admitía la esperanza de ver llegar a una nueva ministra de Ciencia e Innovación (quizás el orden correcto hubiera sido Innovación y Ciencia). Pero también advertía de los peligros que acechan a la donostiarra Cristina Garmendia.

No ha habido que esperar mucho, apenas unas horas, para que las cabezas insignes de la esfera universitaria española hagan oír su voz: no conoce a fondo la problemática de la universidad.

Qué risa señores míos: ¿conocen ustedes esa problemática?

Y vaya por delante que he sido durante veinticinco años del gremio y, en consecuencia, no me imagino cosas. Y de igual manera, quede claro que en la universidad hay tan buenos profesionales como en el gremio de fontaneros o arquitectos.

La Universidad española es como el negocio del circo, es de toda la vida, pero no evoluciona – salvo honradas excepciones como es el caso del Circo del Sol. Es el perfecto ejemplo de lo que yo llamo la cultura del culpable. Es decir, tienen un problema, pero su estrategia es encontrar al culpable de todos sus infortunios. Y además tienen la desgraciada fortuna de estar a medio camino de todo con lo que pueden repartir culpas a diestro y siniestro: a los de abajo por no preparar mínimamente a sus alumnos y a los de arriba por no financiarles con más generosidad sus papers.

Hace ya algunos años cenaba en compañía, entre otros, del máximo responsable de una escuela técnica del País Vasco de larga tradición y prestigio. La cosa iba bien, es decir se comía, bebía y se comentaban naderías, hasta que salió el eterno calvario de las lamentaciones que concluyo con un rotundo: Nosotros no bajamos la guardia, sólo un 30% de los alumnos que ingresan en nuestra escuela consiguen acabar sus estudios. Esta es la clave de nuestro éxito.

Servidor que, entre otras cosas, es un tocapelotas por convicción, no pudo reprimirse y le contesto educadamente: Yo analizaría con detalle ese tipo de éxito, más bien parece un gran fracaso conseguir que apenas un tercio de sus alumnos acaben satisfactoriamente sus estudios.

Muy señores míos, no sé hasta qué punto la nueva ministra de Innovación y Ciencia conoce la auténtica problemática de la universidad española, pero han de saber que en innovación, una cierta ignorancia que llamamos “no contaminación del modelo estable” es un valor. Y ustedes están más contaminados que una almeja del Prestige.

Buenos días y buena suerte

sábado, 12 de abril de 2008

GAUPASA


Se acabo la fiesta era el título de mi último post. Pues bien, he de corregirlo por este que titulo GAUPASA.

Ante todo, explicar este término muy vasco y que podría traducirse como “seguir la fiesta”, aunque se utiliza para los trasnochadores que llegan con el diario debajo del brazo y cara de buenas personas.

Gaupasa porque en ese diario nos hemos desayunado con la noticia de que Cristina Garmendia Mendizábal es la nueva ministra de Innovación. ¡Qué bien suena! Pero que peligroso es el tema, no? Eso de estar en una reunión de alto nivel europeo y decir: Yo soy ministra de Innovación. Y que el contertulio te responda: ¡Ah! ¿Y qué innova usted?

No es mi intención ser un aguafiestas de la gaupasa y creo que hay que conceder al menos la dispensa papal de los cien días. Pero la cosa no está nada, pero que nada clara.

¿En qué va a consistir todo esto? Existen distintas alternativas múltiples que decimos en innovación:

· Jugada de Fashion de la Muerte del señor Zapatero. Esperemos que no sea así porque los números cantan y puede llegar a ser el chiste del año sin necesidad de que Mariano interprete la ópera bufa.

· Buena voluntad de ZP confirmada al poner al frente del invento a alguien como Cristina Garmendia, cercana a Miguel Sebastián, y con una trayectoria envidiable en biomedicina y biofarmacia, fundadora de Genetrix, la primera iniciativa privada surgida a la sombra del CNB. Si es así, gracias ZP. Sin embargo habrá que esperar que el sesgo que adopte el nuevo ministerio no sea exclusivamente centrado en la investigación y de encumbramiento a los master papers de las unis.

· Improvisación a la enésima potencia, es decir: señores hay que seguir con este tema. Las preguntas son: ¿Innovar qué? ¿Innovar quién? ¿Innovar cómo? Tenemos que suponer que las respuestas ya las conocen los responsables últimos. Si es así, quizás asistamos a un cambio de rumbo en las políticas Bienvenido Mr. Marshall que se han practicado con las pymes o la configuración de chiste de las líneas de ayuda oficiales. Quizás incluso se haya caído en la cuenta de que uno de nuestros principales problemas es el de la productividad y la innovación tecnológica poco tiene que aportar sin antes practicar innovación de procesos e innovación emocional. O que otro de nuestros problemas endémicos es el de la internacionalización y la innovación de modelos de negocio tiene mucho que decir. Y finalmente, que la innovación es necesaria en todos los frentes, luego este habrá de ser un ministerio “tocapelotas”, es decir que incite y, en consecuencia, cabree a otros ministros léase: innovación del sistema judicial, innovación social, etc.

No es que no quiera reconocer mi error, pero, de momento, la fiesta se ha acabado. Algunos quieren hacer gaupasa. ¡Ojala que tengan suerte!

Y una última recomendación para la nueva ministra que dudo llegue a leer en este olvidado rincón de la red: En este país hay mucha gente que confunde la moda con el estilo, no se deje llevar.

miércoles, 9 de abril de 2008

SE ACABO LA FIESTA


Se acabo la fiesta de la Innovación o al menos eso se desprende de revisar los medios de comunicación. Y sin consultarlos, quienes tenemos que venderla todos los días, percibimos cierto retroceso en la expectación. Sin embargo, si tengo que ser sincero, resulta un alivio inesperado.

En los últimos tiempos, había dominado la tendencia que denomino Fashion de la muerte y que nunca puede ser buena para algo tan complejo como es la creatividad, la invención y, en definitiva, la innovación. Todo quisqui se apuntaba a esto de la innovación, los unos porque era lo cool en el panorama, los otros porque olfateaban pasta loca. En cualquier caso, oportunistas dispuestos a hacer negocio innovando sus anteriores manuales de gurús e incautos que no sabían demasiado bien donde se metían.

A la innovación se accede por convicción y no por necesidad. Los primeros son los Estratégicos y los segundos los Apagafuegos, de acuerdo a mi catalogación de Tribus de la Innovación. La innovación es parte del ADN de la organización y nace con ella, tan sólo hay que activarla e impulsarla en los momentos y circunstancias adecuadas. Y casualmente, esta es una de ellas. Sin embargo, no todos van a reaccionar de igual forma ante la crisis, perdón estabilización y posible cambio de ciclo.

Unos optarán por las rutinas de rigor en estos casos: reducir costos, reestructurar, no arriesgar y esperar a que escampe.

Otros harán lo que hay que hacer en estos casos, es decir innovar. Lo gracioso es que los primeros acabarán diciendo aquello de en río revuelto ganancia de pescadores. Pues sí, porque sólo los pescadores pescan, los demás están en casita esperando a que dejen de caer chuzos.

domingo, 6 de abril de 2008

MEJOR HUEVO QUE HAMBURGUESA


Los futuribles de la organización son aquellas cosas que traen de cabeza a todos y cada uno de sus miembros. Para los más visibles se traduce en continuidad, prestigio y poder. Para los que han medrado, pero aun desean más, equivale a cuentas de resultados aseguradas y superadas, equipos eficaces y eficientes. Para los curritos suponen mayor seguridad, virgencita que me quede como estaba.

Todos ellos, en mayor o menor medida, aspiran a percibir el futuro como una hamburguesa. Y es que las hamburguesas pueden ser elaboradas a la carta en su grosor y diámetro. Cuando caen en la plancha, salvo una leve contracción, conservan sus formas de forma inalterable, incluso las confirman con rotundidad.

Pero el futuro lejos de parecerse a una hamburguesa, se asemeja a un huevo. El huevo que encierra en su cascara una clara y yema indomables. Una clara y yema que al caer en la sartén se expanden en todas direcciones de forma impredecible.

Y es que los planes estratégicos son útiles para conocerse, calcular fuerzas y, sobre todo, construir sueños a los que aspirar. Pero convertirlos en las santas escrituras de la organización es tan inútil como dar ordenes al futuro.

El futuro jamás será una hamburguesa, para nuestra fortuna es un indómito huevo que necesita que inventemos espumaderas para reconducirlos en la sartén del futuro.

Este es el SEGUNDO DE LOS ERRORES CASI MORTALES:

CONFUNDIR EL FUTURO CON UNA HAMBURGUESA

Y es que, como decía Ortega y también mi abuela: la Vida son nuestros actos. En esto reside la gracia de la Innovación.

miércoles, 2 de abril de 2008

NO HACER LOS DEBERES


Quiero abrir esta serie de ERRORES CASI MORTALES con el que considero más evidente:

NO HACER LOS DEBERES

¿Cuándo somos más creativos? La respuesta es sencilla, los primeros años de nuestra vida. ¿Cómo? Pues sí y se puede demostrar con lo que llamo la prueba del tres:

3

¿Qué es esto?

Evidentemente un tres, pero si se lo preguntamos a un niño de tres años, nos diría cosas como estas: un croissant, dos túneles, unos cuernos, dos montes, dos dedos, las orejas de un conejo y muchas cosas más.

Y es que en nuestros primeros años de vida carecemos de modelos estables lo que nos permite desplegar una gran capacidad multi interpretativa y analógica y, en definitiva, un gran potencial de Inteligencia Creativa. Cuando iniciamos nuestra andadura por los templos de los modelos estables, es decir, la escuela, ese potencial decrece de forma progresiva a favor de una visión e interpretación estable del entorno desarrollando nuestras capacidades de Inteligencia Vertical a favor de los modelos estables.

La escuela tiene como misión transmitir modelos estables de todo tipo: matemáticos, sociales, lingüísticos, etc. Pero debe tener también como misión el desarrollo de la Inteligencia en sus esferas más generales: Vertical y Emocional. Esto último es la gran asignatura pendiente de nuestro sistema educativo.

Y todavía queda otro deber sin hacer. En este, el verbo no es desarrollar, sino PRESERVAR el gran potencial de Inteligencia Creativa con el que nacemos. Quizás esto nos evitaría la necesidad de reciclar a las personas en edad adulta, luchar indefinidamente contra la resistencia al cambio, pagar las cuentas del Gran Capitán a los Cien Mil Consultores de San Luis y muchas otras cosas más que inciden de forma negativa en la cuenta de resultados nacional de un país que aspira a ser líder en Innovación.

Hay que hacer los deberes porque no progresamos adecuadamente.