sábado, 8 de marzo de 2008

DON´T WORRY BE HAPPY


Acabo de regresar de un encuentro con profesores de ciclos formativos de la red de centros de La Salle - por cierto, una de las organizaciones más activas en innovación educativa en este país-. Ciertamente, resulta refrescante cambiar de ámbito de vez en cuando y volver a los orígenes para intercambiar ideas con las personas que están en un auténtico frente de batalla diario. Ayer por la tarde hablamos de innovación, creatividad, personas y empresa - algo que yo prefiero llamar organizaciones- y, casi al concluir la sesión de trabajo, surgió una pregunta maldita: ¿cuál es el objetivo de una empresa? Cuando me hacen ese tipo de pregunta, mejor esa pregunta en concreto, mi respuesta es siempre la misma: LA EMPRESA ESTÁ PARA HACER FELICES A LAS PERSONAS Pero siempre que contesto de esta forma, comienzan a aflorar miradas chispeantes y sonrisas esbozadas. Algo así como: ¿de dónde sale este? Pues de la vida misma compañero. Si las personas no son felices, es dudoso que la empresa - organización pueda aspirar a grandes cosas. El objetivo es que el empresario sea feliz, los accionistas sean felices, los empleados, todos, desde el director general al recepcionista sean felices y coman perdices. No me imagino otro fin. Y quisiera añadir algo más en esta happy hour: La creatividad y, en definitiva, la innovación tienen como fin esencial hacer felices a las personas. A unas las hará felices con un montón de pasta gansa, a otras con la increíble satisfacción del objetivo conseguido, quizás otras sean felices con el reconocimiento y agradecimiento de sus compadres y hasta habrá alguno que sea feliz viendo a los demás felices. Y como me he puesto sentimentalmente metafísico, quisiera acabar con otra extraña reflexión: NADIE TRABAJA POR NADA PERO NO TODO EL MUNDO TRABAJA EXCLUSIVAMENTE POR DINERO. Buenas noches y SEAN FELICES.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Efectivamente, menos viagra y más Platón.

Anónimo dijo...

Soy empresario, soy infeliz pero desde luego no le falta razón, prometo esforzarme por ser feliz.

Gabriel Expósito dijo...

Estoy contigo, la pasta no lo es todo.